- 'Oye, quedé con Glo para tomar un café. ¿Vienes?'
- 'Voy. Aunque llevo prisa, al menos pasaré para saludar.'
La verdad es que ahora me alegro, incluso más que entonces, de haber ido. De haber hecho un hueco entre los miles de recados que tenía para pasar cinco minutos charlando con ella.
Como siempre, su conversación fue sumamente amable, amena, comprensiva, jovial, alegre, inteligente...
Como siempre, sólo eran necesarios 5 segundos para conectar abiertamente, sin obstáculos, sin barreras, sin tapujos...
Como siempre, sólo era necesario que escribiera 5 palabras para conectar abiertamente, sin obstáculos, sin barreras, sin tapujos...
Ayer esa conexión se interrumpió para siempre.
Si se han inventado los minutos de silencio internautas, nadie mejor que ella por quien rendir ese homenaje.
Y si no se han inventado, nadie mejor que ella por quien hacerlo.
Se te echará mucho de menos, servidora